Centro de Rehabilitación Médica Avanzada, Vsllaviciosa de Odón, Medicina Subacuática e Hiperbólica, Rehabilitación, Fisioterapia, Psicología, Logopedia

Durante los primeros días las personas sufren cansancio, mal humor, dolores de cabeza, e incluso pérdida de apetito.

El cambio de horario tiene como objetivo maximizar la exposición de las personas al sol y la luz durante las horas en que la población está despierta y activa.

En ese sentido, la medida resulta acertada. Entonces, ¿por qué cambiar de hora afecta a nuestro cuerpo?

Cambio de hora

Adaptarse al cambio de hora nos resulta complicado a todos y existen una serie de causas que hacen que esta adaptación nos cree dificultades.

¿Por qué nos cuesta adaptarnos a ese cambio de hora que se supone tan beneficioso para nosotros?

Principalmente, por el cambio en la secreción de hormonas, sobre todo melatonina. Este cambio es suficiente para que el organismo se resienta y aparezca el cansancio, la fatiga e incluso, la  irritabilidad en las personas.

Los estudios dicen que esta alteración hormonal es transitoria y debería regularse por sí sola en unos pocos días.

Además, los datos apuntan a que a nivel biológico los cambios son mínimos. Sin embargo, es frecuente que a nivel popular, las personas verbalicen durante esos primeros días quejas como cansancio, mal humor, dolores de cabeza, pérdida de apetito, problemas para conciliar el sueño, e incluso, para levantarse por la mañana.

¿Por qué hay tanta diferencia entre lo que dice la literatura especializada y lo que escuchamos en la calle?

Los estudios hablan de datos bioquímicos y niveles hormonales, mientras que las quejas de las personas se refieren sobre todo a la dificultad para encajar sus rutinas diarias en las nuevas horas de luz.

Se podría decir que los relojes biológicos se desincronizan de nuestros hábitos.

Los niños y personas mayores son los más sensibles a estos efectos y los que más tiempo necesitan para readaptarse.

Todos los seres vivos siguen el ciclo circadiano de oscuridad y luz, debido a la rotación de la Tierra sobre su eje. Una gran mayoría de las funciones del cuerpo humano, como la temperatura, la presión arterial, la alerta, la producción de hormonas se ven afectadas por estos ciclos.

Otros ejemplos de desincronización de nuestro reloj biológico.

Otros ejemplos de desincronización de nuestro reloj biológico, que afectan a la salud son:

  • El trabajo en turno de noche, que provoca efectos agudos, como somnolencia y falta de atención y también efectos a largo plazo, como obesidad, diabetes o enfermedades cardiovasculares.
  • La exposición durante horas a pantallas de móviles o a iluminación LED por la noche, provoca una reducción de nuestros niveles de melatonina, la hormona que nos ayuda a regular el sueño, dificultando también un descanso de calidad.
  • Cenar tarde, a horas en las que el cuerpo entiende que es de noche y, en cambio, le mandamos una señal contradictoria a través de la ingesta de comida, que es algo propio del día.
  • El jetlag, que se produce por la dificultad para adaptarnos inmediatamente a los cambios de zonas horarias.

 

Desde el Centro GF nuestra psicóloga te ayuda a regular la desincronización de tu reloj biológico por cambios de horarios, dándote pautas que mejoren tu ciclo del sueño.

Citas y consultas: ? 91 616 31 62

Deja una respuesta

Tu email no sera publicado.

*